Cada vez es más habitual encontrar en las vitrinas de las máquinas de vending productos que responden a los estándares de la alimentación saludable: Bajos en grasas, sin azúcares añadidos, aptos para celiacos, productos eco, veganos… o fruta envasada para vending.
Y es que, con el auge de la alimentación saludable, el vending se enfrenta a la necesidad de incluir alimentos como la fruta envasada para vending y así satisfacer las expectativas de un gran número de consumidores.
La fruta envasada para vending ofrece comodidad
Aquí es donde entra lo que se conoce como la IV gama. Frutas y verduras limpias, troceadas y envasadas para su consumo. El producto mantiene sus propiedades naturales y frescas. Y tiene una fecha de caducidad de entre 7 y 10 días.
Pero dentro del concepto de fruta envasada para vending también se encuentran esos botes que ofrecen piezas enteras de plátanos, naranjas o manzanas para consumirlas en cualquier momento.
¿Las ventajas de cada formatos? La IV gama ofrece comodidad y rapidez. Por su parte, la fruta fresca y entera se percibe como más natural y coincide con nuestra forma de consumo habitual.
En ambos casos ofrecen comodidad, ahorro de tiempo y suele tener una presentación saludable y atractiva. Así, estos productos captan la atención del consumidor y poco a poco van comprándolos.
Sin embargo, es cierto que la fruta envasada para vending tiene que hacer frente a una doble “amenaza”: tienen una fecha de caducidad muy limitada y el consumidor está acostumbrado a adquirirlos en otros canales de venta.
A ello se une que deben competir con el atractivo de refrescos, snacks y chocolatinas de toda la vida, que siguen ocupando los primeros puestos de venta.
Los estudios de hábitos de consumo en el sector demuestran que un porcentaje muy elevado de los consumidores, no tienen su compra decidida, lo que se reconoce como una “oportunidad” para las grandes marcas de refrescos y snacks para colar sus productos estrella sin esfuerzo.
Utilizar herramientas de marketing apropiadas incentiva el consumo de la fruta envasada para vending
Sin embargo, un ensayo realizado por la Universidad de Yale demuestra la efectividad de utilizar herramientas de marketing apropiadas para hacer compatible o más “amigable” la venta de productos frescos con la venta automática.
Se instalaron en el campo de la Universidad de Yale tres tipos de máquinas de vending. Unas ofrecían solo productos saludables, otras los destacaban entre otros con atractivos descuentos, y las últimas, incluían información específica sobre los valores calóricos y nutricionales del producto y las ventajas de una alimentación saludable.
El estudio demostró que reducir los precios de los productos en este canal de venta, no influye de una manera decisiva entre los consumidores. La divulgación y la información específica sobre las bondades de estos productos, ha demostrado una mayor influencia en la decisión del consumidor.
Sin duda alguna, la unión de todas las estrategias -especialización del producto, posibilidad de incluir ofertas, presentación atractiva y etiquetado con valor informativo- es la respuesta al nuevo reto del vending saludable.
Así la fruta envasada para vending se suele colocar en lugares destacados. Además ha mejorado significativamente su presentación y etiquetado para destacar de forma clara y visual su virtudes frente a otros productos.
A veces basta con que nos recuerden que un producto es bajo en calorías, contiene antioxidantes o fibra para terminar pulsando por la opción “fruta fresca”.
Las etiquetas llamativas ayudan a facilitar las decisiones informadas. Un ejemplo más de que un bocado rápido, puede ser además un bocado sano.
Gesvending